Cuando esta pareja contactó conmigo ya tenían bastante claro cómo querían que fuesen sus sesiones fotográficas antes, durante y después de su boda, y en qué diferentes ambientes les gustaría que se desarrollase cada una de ellas. Así que para la sesión de fotos de preboda decidimos que nos acompañaría Bimba, su perrita y que le daríamos un “toque” rural en el que abundase el color verde y dejar la zona de costa y playa para la posterior sesión de posboda.
Para esta ocasión nos decantamos por un marco incomparable como son las Fragas do Eume y el Monsaterio de Caaveiro, situado en el “corazón” de las mismas. Ya habíamos estado allí en más ocasiones pero siempre logramos encontrar nuevos rincones para conseguir dar un cariz diferente a cada sesión. Si todavía no has visitado este maravilloso lugar te invito a que lo hagas cuánto antes porque ante una “joya” semejante no saldrás defraudad@.
Como ya nos resulta habitual Rosalía y Alex estaban un poquito “nerviosillos” al comienzo de la sesión pero enseguida entendieron el “mensaje” y la sintonía fue total, de ahí los buenos resultados conseguidos. Por cierto, Bimba se portó genial.
Un enorme agradecimiento a esta pareja por habernos elegido como sus fotógrafos de boda ya que es una gran satisfacción poder contar con personas tan cercanas y amigables como ellos.
Mención especial a Mari Carmen, la madre de Rosalía, que tan pacientemente aguantó la duración del reportaje… Una crack!!!