Después de cincuenta años desaparecida, en el año 2009 se consiguió recuperar la tradición de Os Reises en la región asturiana del Valledor, perteneciente al municipio asturiano de Allande. Gracias al esfuerzo realizado por la Asociación “Amigos de Fonteta” (uno de los pueblos del Valedor) se ha conseguido recuperar esta singular reunión anual que destila autenticidad y que tiene lugar entre música, peticiones, bailes, canciones y “trastadas” varias.
La comitiva consta de once personajes habituales, que van acompañados de algún gaiteiro, tambor y acordeonista. Recorren los pueblos de Villalaín, San Salvador y Fonteta, parando en cada casa habitada (salvo en aquellas que hayan tenido algún fallecimiento ese año) pidiendo el aguinaldo. Suele encabezar el grupo el “Choqueiro” haciendo sonar las “lluecas” (cencerros) que lleva colgadas a la cintura, le siguen los guapos y los feos, entre ellos el Militar y el Valenciano con sus respectivas Madamas, dispuestos a cantar y bailar no sin antes pedir permiso para hacerlo diciendo: “¿Cantamos o andamos? y si la respuesta es “cantamos” entonan una misma melodía que dice: “Aquí venimos cuatro, cantaremos dos, denos el aguinaldo señora por Dios…” Una vez cantada “A Gocha” recoge los regalos ofrecidos en un saco que se lleva para luego compartir todo el grupo. Mientras tanto, el resto de la comitiva andan realizando trastadas por todos lados: el Maragato encargándose de que nadie pase sin un bocado de nabo y pesando en su romana los pechos de mujeres y las “partes nobles” de los hombres asistentes, la Barredora que ensucia más de lo que limpia, la Cardadora siempre en sus labores de encontrar piojos en el pelo de la gente más que de cardar la lana, el Ródalo continuamente haciendo travesuras, tirando tierra, piedras, leña apilada, atravesando palos en los caminos o quitando gorros y levantando faldas.
Al final de la jornada se realiza una comida de fraternidad para todos los participantes y a la que están invitados todos los asistentes, en la cual no falta la música y bailes tradicionales.
No te pierdas esta mazcarada, merece mucho la pena y… el lugar es increíble.
Grande a reportaxe e as fotos! Unha nova cita a ter en conta para coñecer e disfrutar. Graciñas Fer.